La labor del Banco de España: ¿cuestionable?

Este sábado leyendo algunos de mis diarios digitales favoritos me encuentro con algo que yo ya había anticipado. En esta crisis ha habido personas (o entidades) que no han hecho bien su trabajo. Yo siempre había sospechado del Banco de España, pero nunca había coincidido con otros en este sentido.
 
La globalización según Noam Chomsky, profesor emérito de Lingüística del MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts) en la Universidad Harvard.
 
 
La cuestión es que yo en tiempos me preguntaba, ¿y eso del Banco de España, que es? Y claro, mi pregunta era lógica, ya que en aquellos entonces había desempeñado trabajos de tipo comercial por los cuales me enteraba siempre de que banco era el de mis clientes. Así que lo más corriente era encontrarme con Caja de Badajoz, Caja de Extremadura, La Caixa, BBVA, Banesto…; pero nunca me encontraba a nadie que tuviera una cuenta en el afamado Banco de España que continuamente sonaba en las noticias. Y la verdad, nunca me paré siquiera a pensar en un por qué.
 
La respuesta me vino de manera casual un día que fui a mi banco a pedir un crédito. Así que pasé al despacho del director de la oficina, con el que tenia amistad desde hacia muchos años, y mantuvimos una primera conversación sobre temas triviales del día a día, y seguidamente pasamos al asunto de mi crédito. Entonces el me pregunto que para que quería el crédito, y bueno, me sorprendía que siempre me que pedía un crédito me preguntaran para que lo quería. Mi impresión era que para que lo quisiera, era lo de menos, yo presentaba mis garantías y mis avales, y que hiciera con el dinero era cosa mía, dado que al final era yo quien pagaba las mensualidades.
 
Así que dada mi amistad con el director, le respondí con otra pregunta, que fue más o menos: “no te lo tomes a mal, ¿pero al banco que más le da para que quiera yo el dinero”. Y a esto me respondió de manera contundente, me dijo algo así como:
 
mira, cuando un banco presta dinero a uno de sus clientes lo hace bajo unas normas, normas que todos los prestamistas debemos cumplir. Estas normas consisten básicamente en conocer el fin del dinero, por que entre otras cosas, no se pueden conceder créditos para pagar otros créditos. Debe haber una capacidad de pago, y no es lo mismo pedir dinero para invertirlo en un negocio que para comprar un coche, debe también haber unas garantías personales, por que no le podemos prestar dinero a quien no hay indicios que pueda cumplir con los pagos. Y por ultimo, si las cosas se te complican, el banco no puede cargar con tus problemas, ya que entonces los bancos quebrarían, por tanto, debe haber alguien que de la cara por ti, es decir, un avalista. Y de que todo esto se cumpla, se encarga el Banco de España, es por decirlo de alguna manera, nuestro vigilante, el que se preocupa de que yo (el director) como amigo tuyo, no te preste el dinero a locas, para que en el futuro pueda darse una situación de embargo contra ti, de la misma manera que tu no quieres demandar a uno de tus clientes por que no te paga, tu quieres que te pague y punto.
 
Sus explicaciones fueron francas, y quizás alguien las considere insultantemente duras, pero es la realidad, si prestas quieres que te devuelvan el dinero. Y esto, todo el que tiene algún tipo de actividad por cuenta propia lo sabe. Cualquier comerciante cuando le da “fiado” a un cliente, está en cierta manera haciendo de banquero. Y aunque lo pueda hacer, el comerciante no quiere llegar a demandas judiciales, por que entre otras cosas, cuestan dinero y son lentas, muy lentas. Por que ha de ser diferente un banco al propietario de la tienda de nuestro barrio, al que le vamos a comprar el pan, y en el momento del pago te das cuenta de que no llevas la cartera, y él te dice: “no te preocupes, mañana me lo pagas”. Y él, como es lógico, cuando llegue mañana, querrá su eurito del pan.
 
Pues bien, con todo esto, ya puedo dar por sabido que el Banco de España es una autoridad de supervisión y control de las operaciones financieras que se llevan a cabo en nuestro país. Y esta labor es fundamental, por que si no se realiza de manera eficiente, más de uno puede conceder créditos a la ligera para ganarse una comisión, por que a fin de cuentas, el cobrará su comisión, pero será el banco y el cliente quienes se lleven los problemas.
 
Y he dicho el banco y el cliente, algunos dirán, “será el cliente”, pues bueno, yo digo una cosa, si así fuera, el Grupo Bankia no se estaría nacionalizando, y esta crisis es la consecuencia de “la mala salud” de las entidades bancarias y de crédito.
 
Como ya dije en este post, en el boom del ladrillo se concedían cantidades de crédito desmadradas de manera fulminante, como quien regala caramelos en la puerta de un colegio, a casi cualquiera. Si querías un piso de 150.000 euros no tenias más que llegar a tu banco con una nomina de 900 euros de la construcción, le contabas lo que ganabas en horas extra, y que la “parienta” también se sacaba otros 1.000 euros más con este y el otro trapicheo, y “buala”, tenias una hipoteca concedida no de 150.000 euros, sino de 200.000, para que pudieras amueblar el piso, comprarte un coche e irte de vacaciones para estrenarlo como es debido.
 
Con todo esto, puede verse claro que alguien no cumplió con su trabajo. Y ese alguien, tiene un nombre, Francisco Fernández Ordóñez. Pero no es el único, él es parte de una cadena que mostró muchos fallos, por que en ultima instancia, el gobernador del Banco de España está supervisado por el gobierno, y el gobierno tiene ahora y tenía entonces la capacidad para “tirarle de las orejas” o incluso, destituirlo.
 
Como los medios de comunicación tratan a unos y otros políticos, de verguenza¡¡¡.
 
Todo esto fue una consecuencia directa de las bajadas de los tipos de interés. Un amigo mío compro un chalet en la famosa urbanización pacense, Las Vaguadas, a principios de los 90 por unos 15.000.000 millones de las antiguas pesetas. Si ves el chalet, dices incluso a día de hoy, un chollo. Pero entonces no era tanto chollo, si no recuerdo mal pagaba sobre un 14% de interés anual.
 
Cuando llegaron las bajadas de los tipos de interés volvió a renegociar la hipoteca, y si no recuerdo mal, en una ocasión me dijo que ya tenia la hipoteca al 5%, 9 puntos menos. Todos diremos, como ya lo dijimos entonces, que chollo de hipoteca. Pero este chollo también tenia un problemilla, el alargamiento de los plazos. Lo cierto es que a día de hoy, creo (no estoy seguro) que aún sigue pagando hipoteca, cuando si dicha hipoteca la hubiera dejado tal cual se negoció la primera vez, ya llevaría años pagada. ¿A que ya no es tanto chollo?
 
La cuestión es que la bajada de los tipos de interés tuvo varios efectos:
 
1)    Las personas estaban más dispuestas a hipotecarse por que cada vez el coste de una hipoteca era inferior.
2)    Los bancos cada vez estaban más dispuestos a conceder crédito por que las bajadas de los tipos de interés les mermaba los beneficios.
3)    Los dos puntos anteriores hicieron que el precio de la vivienda subiera más y más.
4)    La subida continua de los precios de la vivienda, unida a la bajada de los tipos de interés hizo que el propio endeudamiento fuera un negocio, ya que la vivienda se revalorizaba por encima del interés que se pagaba por las hipotecas, creándose así lo que se llama “una burbuja”.
5)    Las burbujas tienen un “pequeño problema” que explotan.
 
Y, ¿pretende alguien decir que el Banco de España no se enteró de nada de esto?
 
Zapatero encumbrando la situación económica de España.
 
Venga, que se lo cuenten a otro.
 
Lo sabían, pero había mucha gente ganando suculentas comisiones con operaciones financieras, la propia burbuja creó tantas empresas que el estado “nadaba en la abundancia” como consecuencia de los impuestos que recaudaba. Y no hubo nadie que se atreviera a poner las cosas en orden. Si esto se hubiera hecho en su momento, no estaríamos donde estamos. Pero como estábamos en “la Champion Lige de la economía mundial” y a todo el mundo le gustaba escuchar eso, pues listo, a continuar volando a “todo trapo” sobre la burbuja.
 
Y los que hoy hablan de “la dictadura de los mercados” son los mismos que entonces decían que “todo el mundo tiene derecho a una vivienda digna”, alimentando así la burbuja de la que hoy se lamentan.
 
Parece que la solución para algunos es “como ya no tengo dinero no pago, lo siento amigo”.
 
Como ya dije en otro post, los políticos han encabezado la crisis, los políticos nos han traído la ruina, y como siempre ocurre, el ciudadano de “a pie” se “come la mayor parte de la mierda”.